Las condiciones del juego quedaron claras cuando arrojaron en la casa una lata con reglas garabateadas. Solo un loco -o algo peor- podría haberlas escrito. Son reglas que no tienen sentido, pero hay que seguirlas.
Bienvenidos a mi casa
Reglas de la casa
1.Dios vino a mi casa y yo lo maté
2.Mataré a cualquiera que entre en mi casa, así como maté a Dios.
3.Denme un cadáver y tal vez yo pueda prescindir de la regla dos.
El juego termina al amanecer.
Un juego.
Siete jugadores.
Tres reglas.
Termina al amanecer.
Este libro también me lo prestaron, Al principio pensé que solo era un libro más.
Pero al comenzar a leerlo no podía dejar de hacerlo, era como si yo estuviese también en aquella sobrenatural casa y solo quisiera leer y leer para que las horas pasaran y llegara el amanecer, para que todo acabara.
El principio del libro me recordó mucho a las clásicas películas de Estados Unidos donde pasan horrores en alguna carretera lejana y solitaria.
Fue la primera obra de Ted Dekker que leí y de quien he leído otras obras que me gustaron y tal vez les cuente más adelante.
Es un escritor cristiano que no trata de adoctrinar por medio de sus libros pero siempre le brinda a quien quiera aceptarlo una moraleja y reflexión.
De este libro también hicieron una película Ficha en IMDBque entretiene pero que no le hace justicia al libro.
Me llama mucho la atención. Esa sinopsis me deja intrigada.
ResponderEliminarEste fue el primer libro de Ted Dekker que leí. La película no es tan buena.
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